Transmisión fatal: a 23 años del desastre en Quincy
El vuelo 5925 de United Express, operado por Great Lakes Airlines, era un vuelo programado regularmente desde el Aeropuerto Internacional Chicago O’Hare a Quincy Baldwin Field, Illinois, con una parada intermedia en Burlington, Iowa. El vuelo era operado en una aeronave turbohélice Beechcraft 1900C.
El 19 de noviembre de 1996, el vuelo 5925 de United Express había salido de Chicago a las 15:25 hora local, con un retraso de 3 horas. Estaban al mando de la aeronave la Capitana Kate Gathje (30) y el Primer Oficial Darren McCombs (24). La tripulación no contaba con tripulantes de cabina de pasajeros, por lo que las demostraciones de seguridad se realizaban en forma audible en los altavoces de la cabina. A bordo viajaban 10 pasajeros.
Después de una parada intermedia en Burlington, el Beechcraft 1900C, registro N87GL despegó nuevamente con destino a Quincy a las 16:40 hora local.
Cuando la aeronave realizaba su aproximación a Quincy, dos aviones estaban rodando a la pista 04, listos para partir: un Beechcraft King Air 65-A90 registro N1127D (comandado por un piloto retirado de TWA) y un Piper Cherokee, registro N7646J.
El aeropuerto de Quincy (Baldwin Field) es uno de los varios aeródromos regionales en Estados Unidos que no cuentan con una torre de control, por esa razón los aviones operaban en la misma frecuencia de aviso de tráfico común.
La tripulación de United Express preguntó por primera vez si el King Air esperaría o si iba a partir a las 16.59:29. La tripulación de King Air no respondió, por lo que se volvió a preguntar al King Air si esperaría, a las 17.00:16. Esta vez, el piloto del Piper Cherokee respondió que estaba esperando en la pista 04.
Debido a la advertencia de altitud GPWS de 200 pies en la cabina del Beechcraft 1900, solo se escuchó la última parte de la transmisión, incluidas las palabras «King Air». Probablemente pensando que el King Air estaba esperando, la tripulación de United Express continuó su acercamiento a la pista 13. Sin embargo, el King Air había rodado a la pista y había comenzado su recorrido de despegue cuando el Beechcraft 1900 tocó el asfalto.
Con toda esta cadena de eventos críticos, se produjo una colisión en la intersección de las pistas 04 y 13. Ambas aeronaves se arrastraron unos 110 pies y se detuvieron a lo largo del borde Este de la pista 13 con el ala derecha del Beech 1900 entrelazada con el ala izquierda del King Air. Ambos aviones se incendiaron de inmediato. Tres pilotos presenciaron el accidente y se apresuraron a la escena. Con el lado derecho del Beech 1900 en llamas, fueron al lado izquierdo y vieron a la Capitana Kate Gathje con la cabeza y un brazo fuera de la ventana, gritando «¡abran la puerta!».
Uno de los pilotos que había corrido hacía la escena del accidente tras haber escuchado la explosión del impacto, era un instructor de vuelo llamado Paul Walker. Él varias veces había intentado mover con fuerza el seguro que bloqueaba la puerta, pero los intentos eran inútiles. El copiloto había intentado abrirlo desde adentro, pero sin resultados. No era posible destrabarla ni por dentro ni por fuera.
Uno intenta imaginar la impotencia que sufrió este instructor de vuelo al escuchar los gritos desesperados de la Capitana Gathje (a quién conocía personalmente) y lo que sintió él al verse obligado a ir en busca de ayuda, lo que significaría abandonar a las 12 personas que habían sobrevivido el impacto pero que habían quedado presas en un avión en llamas. Este instructor de vuelo comenta su experiencia:
Abandonar el avión fue una de las desiciones más difíciles que he tomado en mí vida. Cuando vi a la Capitana Gathje note que ella sabía que si yo iba a pedir auxilio, para cuando regrese iba a ser muy tarde. Literalmente yo era su última esperanza…
Pero apenas el instructor Walker corrió para pedir auxilio, la cuenta regresiva terminaba para esas personas atrapadas. Repentinamente el avión estalla y es consumido completamente por el fuego.
Fue uno de los peores accidentes ocurridos en una pista en la historia de Norteamérica, con un saldo de 14 fallecidos: los 2 pilotos del Beechcraft King Air y las 12 personas a bordo del Beechcraft 1900.
La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) determinó que la causa del accidente fue la falla de los pilotos del King Air para monitorear de manera efectiva tanto la frecuencia común como para buscar tráfico. Un factor que contribuyó fue la transmisión del Piper Cherokee al mismo tiempo que la transmisión de United Express. La falta de equipos adecuados de rescate y extinción de incendios se citó como un factor en la alta tasa de mortalidad.
Fuente:
https://www.tailstrike.com/191196.htm
https://en.m.wikipedia.org/wiki/United_Express_Flight_5925
Fotos e imágenes: Créditos a sus autores.
