El Boeing 737-130: Un Avión de la NASA que Marcó la Historia de la Aviación
El Boeing 737, un avión que simboliza los viajes aéreos, ocupa un lugar destacado en la historia de la aviación. Entre los muchos 737 que surcan los cielos, hay un avión en particular que destaca: el primer Boeing 737 jamás construido, con el número de matrícula N515NA.
Este avión pionero, un Boeing 737 130, desempeñó un papel crucial en el desarrollo del avión comercial más popular del mundo. Sin embargo, el viaje fue todo menos común.
El nacimiento de un legado: el Boeing 737-130
A principios de la década de 1960, Boeing reconoció la necesidad de un avión más pequeño y de corto alcance para complementar sus exitosos modelos 707 y 727. El resultado fue el Boeing 737, diseñado para satisfacer la creciente demanda de aviones de pasajeros de corto y medio alcance.
El prototipo, con número de serie 19437, salió de la línea de producción el 17 de diciembre de 1966 y fue registrado como N515NA. Este avión, designado como Boeing 737-130, fue el primero de su tipo y representó el comienzo de una nueva era en la aviación.
El vuelo inicial del N515NA tuvo lugar el 9 de abril de 1967. Pilotado por el piloto jefe de pruebas de Boeing, Brien Wygle, el vuelo dio inicio a un extenso programa de pruebas para certificar el 737 para el servicio comercial. El avión se sometió a rigurosas pruebas durante los siguientes meses, incluidas varias evaluaciones de rendimiento y comprobaciones de sistemas. El 15 de diciembre de 1967, el 737 recibió su certificación de la Administración Federal de Aviación (FAA), allanando el camino para su entrada en el mercado comercial.
La NASA y el 737
Tras su certificación, el primer Boeing 737-130 no entró en servicio comercial como cabría esperar. En su lugar, la NASA lo adquirió en 1973, lo que marcó el comienzo de un nuevo e importante capítulo en su vida. La NASA había estado buscando un avión que sirviera como laboratorio volante para diversos fines de investigación. El 737, con su tamaño relativamente pequeño y sus sistemas avanzados, se consideró ideal para esa tarea.
El avión, rebautizado como NASA 515, fue ampliamente modificado para su nueva función.
La NASA utilizó el avión principalmente para la investigación del sistema de vuelo por cable digital (DFBW), una tecnología revolucionaria que luego se convertiría en estándar en los aviones modernos. La contribución del 737-130 al programa DFBW fue invaluable, ya que permitió a la NASA desarrollar y probar el sistema en condiciones de vuelo reales.
A lo largo de los años, la NASA 515 participó en numerosos proyectos de investigación, entre ellos el desarrollo de sistemas de detección de cizalladura del viento, aviónica avanzada y diversas tecnologías de control de vuelo. La aeronave sirvió como banco de pruebas para innovaciones que mejorarían la seguridad y la eficiencia de futuras generaciones de aeronaves. A lo largo de los años, numerosos aviones excomerciales se han convertido en bancos de pruebas para la NASA.
Y algunos, curiosamente, también se pueden comprar.
El vuelo final y los esfuerzos de conservación
Según Rbogash , después de casi tres décadas de servicio en la NASA, durante las cuales contribuyó significativamente a los avances en la tecnología de la aviación, llegó el momento de que el NASA 515 se retirara. El último vuelo de la aeronave tuvo lugar el 3 de septiembre de 2003. Esto marcó el final de un viaje notable que había comenzado casi 40 años antes con su primer vuelo como prototipo.
Almacenado en el Museo del Vuelo
Hoy, el primer Boeing 737 construido se exhibe con orgullo en el Museo del Vuelo, donde sirve como un vínculo tangible con los primeros días de la aviación a reacción. La restauración de la aeronave fue una labor hecha con amor, que implicó el trabajo meticuloso de muchas personas dedicadas que reconocieron la importancia de preservar esta pieza de la historia.
Los visitantes del Museo del Vuelo pueden ver el N515NA de cerca y obtener una perspectiva única sobre la evolución de la aviación comercial. El avión se exhibe con los colores distintivos de la NASA, un testimonio de sus importantes contribuciones a la investigación aeroespacial. Para quienes aprecian la historia de la aviación, ver el primer Boeing 737 es un poderoso recordatorio de los avances tecnológicos que han dado forma a la industria.
Según el Museo del Vuelo, estos son algunos de los otros aviones que se pueden ver en la exposición:
- Boeing 247D
- Boeing 727-100
- Boeing 737-130
- Boeing 747-121
- Dreamliner 787
- Boeing 80A1
- Boeing B-29
- Boeing modelo 40B (reproducción moderna)
Un pionero que nunca será olvidado
La historia del primer Boeing 737 jamás construido, el N515NA, es una historia de innovación, exploración y legado. Desde sus inicios como prototipo hasta sus años de servicio en la NASA, este avión desempeñó un papel fundamental en la configuración del futuro de la aviación. Hoy, tal como se erige con orgullo en el Museo del Vuelo, sirve como recordatorio de los increíbles avances logrados en las últimas décadas.
Su recorrido desde la línea de producción de Boeing hasta los laboratorios de investigación de la NASA y, finalmente, hasta su lugar de honor en un museo es un testimonio del impacto de este avión pionero en el mundo de la aviación. El 737 se ha convertido en el avión comercial de pasajeros de mayor éxito de la historia, con más de 10.000 unidades producidas y operadas por aerolíneas en todo el mundo.